
Plan Gallego de personas mayores
El proyecto, que constituye una herramienta de planificación y coordinación, pretende atender la realidad de Galicia, en donde los mayores de 65 años representan el 22% de la población (más de 600.000 personas). De este modo, en el documento se identifican ámbitos y necesidades estratégicas y se definen líneas de acción y respuesta.
Además, hay que tener en cuenta que las cerca de 70 medidas están diseñadas con un enfoque activo y preventivo, que implica a todos los departamentos de la Junta liderados por la Consejería de Trabajo y Bienestar. Así, todas las necesidades y demandas se abordan a través de una perspectiva global, transversal y actual.
Uno de los puntos más relevantes del documento es que devuelve a los mayores un papel activo en la sociedad, un punto que se refleja ya en su participación en la elaboración, de forma que pasan de ser destinatarios a definidores de sus propias políticas. También se fomenta su participación social, se promueve su autonomía y se procura atrasar la dependencia. Como medidas más destacadas se podría citar la creación de un banco de voluntariado de personas mayores o la puesta en marcha de un programa de mentores, en la que los nuevos emprendedores puedan aprovechar la experiencia de los mayores a la hora de poner en marcha sus iniciativas. También se recoge la reactivación del Consejo Gallego de personas mayores, como órgano permanente de participación y colaboración.
Además, hay que tener en cuenta que las cerca de 70 medidas están diseñadas con un enfoque activo y preventivo, que implica a todos los departamentos de la Junta liderados por la Consejería de Trabajo y Bienestar. Así, todas las necesidades y demandas se abordan a través de una perspectiva global, transversal y actual.
Uno de los puntos más relevantes del documento es que devuelve a los mayores un papel activo en la sociedad, un punto que se refleja ya en su participación en la elaboración, de forma que pasan de ser destinatarios a definidores de sus propias políticas. También se fomenta su participación social, se promueve su autonomía y se procura atrasar la dependencia. Como medidas más destacadas se podría citar la creación de un banco de voluntariado de personas mayores o la puesta en marcha de un programa de mentores, en la que los nuevos emprendedores puedan aprovechar la experiencia de los mayores a la hora de poner en marcha sus iniciativas. También se recoge la reactivación del Consejo Gallego de personas mayores, como órgano permanente de participación y colaboración.
Puedes descargarte el documento del Plan Gallego