Castilla y León avanza en la implantación del nuevo modelo de atención residencial con la colaboración de Lares y Acalerte

Castilla y León avanza en la implantación del nuevo modelo de atención residencial con la colaboración de Lares y Acalerte

La Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades está impulsando la implantación del nuevo modelo residencial de atención integral centrada en la persona progresivamente en todas las residencias y centros de día. Muestra de ello es la subida de más del 10 % en la prestación vinculada al servicio (10,5 % de media), que reciben las personas dependientes para pagar la residencia en la que viven o el centro de día.

De esta manera, la prestación máxima de una persona con grado III alcanza los 1.065 euros, frente a los 715 euros que establece el Estado. Una subida que, tal y como subrayó Isabel Blanco, “va a llegar a más de 52.000 beneficiarios de la prestación vinculada y de asistencia personal, y conlleva un incremento del gasto de 17,2 millones de euros”. 

La responsable del departamento de Familia hizo este anuncio durante la firma de un protocolo de colaboración entre la Gerencia de Servicios Sociales y la Asociación Castellana y Leonesa de Residencias y Servicios de Atención a los Mayores -sector solidario- (Lares) y la Asociación de Residencias de Tercera Edad en Castilla y León (Acalerte), con el objetivo de desarrollar el nuevo modelo de atención residencial que permitirá prestar una atención más personalizada y de calidad.

Lares y Acalerte agrupan de forma mayoritaria a las entidades titulares de las residencias de personas mayores en Castilla y León. La Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades mantiene una estrecha colaboración con ambas patronales para la mejora de la atención que prestan a las personas mayores en residencias y centros de día.

Formación para avanzar en el nuevo modelo de atención residencial

El protocolo recoge un Plan de Formación específica y capacitación práctica en el nuevo modelo de atención centrada en la persona para todos los profesionales implicados, desde los que atienden a los mayores hasta los gerentes y directores de los centros de Lares y Acalerte, y de la Gerencia de Servicios Sociales. “Ya se han formado casi 1.500 profesionales: 715 de atención directa y 709 directores y técnicos. Gracias al acuerdo rubricado, que tiene una duración de cuatro años con posibles prórrogas anuales, continuaremos con este plan para la formación y capacitación de los profesionales en el nuevo modelo de atención centrada en la persona”, explicó la consejera.

En concreto, durante 2023 se retomará la formación para el personal de atención directa de los centros y se impartirán un total de 45 cursos de forma presencial, 18 cursos en centros pertenecientes a Lares, dos en cada provincia, y 27 cursos en centros de Acalerte, tres en cada provincia.

Isabel Blanco subrayó que “se trata de una formación imprescindible para los profesionales, ya que el nuevo modelo de atención integral centrado en la persona, en sus necesidades y preferencias, supone una nueva forma de entender los cuidados de larga duración, con cambios significativos en la organización y funcionamiento de los cuidados residenciales”. 

Buen ejemplo de esta formación especializada es la específica en atención libre de sujeciones, “que ya estamos poniendo en marcha en los centros de personas mayores y de personas con discapacidad para que los equipos asistenciales aprendan a cuidar sin sujeciones y a guiarles en este tipo de cuidados”, explicó la consejera de Familia. Tres fundaciones especializadas en este tipo de cuidados: Cuidado Dignos, Dignitas Vitae y María Wolff serán las encargadas de llevar a cabo esta formación.

Reubicación de residentes

Además de esta ambiciosa apuesta por la formación de los profesionales, el protocolo firmado contempla la colaboración en la reubicación temporal de las personas en situación de dependencia derivados de procesos de cierres de centros y otros motivos de fuerza mayor, por un periodo no superior a tres meses, con el fin de realizar su reubicación definitiva al mismo o a otro centro pactada con la persona y su entorno familiar.

Lucha contra la soledad no deseada y el aislamiento social

Por otra parte, el convenio prevé también la colaboración para la detección y atención de personas en situación de soledad, mediante la participación de los centros multiservicios como puntos de encuentro o participantes de la Red Amiga, recogida en el Plan de acción de Castilla y León contra la soledad no deseada y el aislamiento social. “Los centros que colaboren coordinarán y facilitarán sus recursos entre las personas de su zona de influencia para impulsar su participación en actividades que faciliten su interacción social”, matizó Blanco. Y recordó que, con el nuevo modelo, “los centros residenciales se convierten en centros multiservicio, abiertos a la sociedad, que aúnan los cuidados en el propio centro y en el domicilio”.

 

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