La estimulación sensorial en personas mayores a través de terapia

La estimulación sensorial en personas mayores a través de terapia

La estimulación sensorial es un tipo de terapia que trabaja todos los sentidos (vista, oído, gusto, olfato, tacto, propiocepción y sistema vestibular) mediante estímulos y actividades, ayudando a mejorar las capacidades psicomotrices, los procesos cognitivos y la actividad cerebral.

 Los sentidos nos permiten percibir todo lo que hay a nuestro alrededor, mediante ellos recibimos información y la procesamos, de manera que somos capaces de generar percepciones y sensaciones. Gracias a ellos, podemos comprender nuestro entorno, construir aprendizajes, trabajar la atención, así como percibirnos a nosotros mismos.

Actualmente, vivimos en un mundo lleno de estímulos como es la luz, el tacto, el sonido o el gusto, pero lo cierto es que los mejores estímulos son aquellos que están estrechamente relacionados con las vivencias, recuerdos e intereses de las personas. Por ello, reforzar los recuerdos y las funciones cognitivas es esencial para mejorar la conexión con la vida cotidiana.

Uno de los sentidos más importantes a desarrollar en las terapias de estimulación sensorial es el olfato, ya que, a través de los olores se pueden estimular el cerebro y los recuerdos. Por otro lado, la estimulación auditiva también es fundamental para generar sensaciones positivas y agradables.

Varios estudios de la Universidad de Boston demuestran que las personas mayores con deterioro cognitivo pueden conseguir una mejora de la conducta y el humor, disminuir la ansiedad y aminorar las alteraciones conductuales, todo ello mediante sesiones de estimulación sensorial.

Por ejemplo, una investigación realizada por la psicóloga Alice Cronin, de la Universidad de Boston, demostró que cambiar el color del menaje del servicio de comidas de un centro residencial para personas mayores a colores llamativos contribuye a que los mayores con enfermedades neurodegenerativas vean mejor la comida, consiguiendo que consuman un 25 % más que cuando se servía en los platos blancos.

Personas con enfermedades neurodegenerativas

La estimulación sensorial está recomendada en personas mayores, en especial en aquellas que sufren enfermedades neurodegenerativas, como demencias vasculares, párkinson, alzhéimer y enfermedades cerebrovasculares.

Es por ello que en las residencias de mayores tienen presente la importancia de esta terapia y los beneficios que reporta a todos y cada uno de los usuarios.

Las residencias geriátricas de Colisée, entre ellas la nueva residencia de mayores Colisée Bilbao, trabajan la estimulación sensorial en las unidades de vida protegida. Se trata de espacios adaptados a personas con deterioro cognitivo, en los que los mayores se sienten seguros y continúan haciendo uso de su autonomía en las mejores condiciones.

Dentro de las unidades de vida protegida de las residencias de ancianos, se promueve el envejecimiento activo, a través de diferentes actividades como el entrenamiento cognitivo, la socialización, la alimentación sana, el ejercicio físico y el bienestar emocional. Una serie de factores que influyen muy positivamente en la sensación de bienestar, produciéndose un aumento considerable de la calidad de vida de los mayores.

 

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